Ahora si que si, Shanghai ya está aquí.
Después de 22 horas de viaje llegué sano y salvo, con maletas e incluso una sonrisa en la boca. El avión de KLM dejaba bastante que desear, asientos muy pegados, sin monitores individuales, comida mejorable... Pero al menos "casi " cumplió horario y el personal se mostró agradable en todo momento.
Llegamos todos los nuevos becarios a la vez, allí nos estaba esperando Carlos (geixer) actual becario que nos ayudó y ayuda en todo momento. Desde allí nos llevaron en furgoneta a los que son nuestros pisos de acogida hasta que encontremos alojamiento definitivo. Yo estoy viviendo en casa de Natalia, becaria de Castilla y la Mancha, y a la que estoy enormemente agradecido por su hospitalidad.
Después de un par de días muy ajetreados ya estamos medianamente ubicados, tenemos teléfonos chinos, estamos registrados en la comisaría de policía y tenemos una ligera idea de como movernos por la ciudad.
Hemos visitado unos cuantos lugares y locales de la ciudad, lo más destacable brevemente serían el Bar Rouge, local muy pijo pero con unas espectaculares vistas al skyline de Shanghai que merecen mucho la pena, y un megakaraoke del que no recuerdo el nombre, el cual me pareció muy muy divertido. Los karaokes aquí son muy distintos a los que estamos acostumbrados en Galicia. Aquí son habitaciones privadas en la que los que cantan sois tú y tus amigos sin que nadie extraño al grupo os vea, se puede pedir comida y bebida y están muy bien acondicionados. Si alguien se anima a visitarme seguro que le llevaré a uno.
Y por fin, hoy hemos tenido nuestra primera clase de chino. Durante los tres primeros meses esta será nuestra principal actividad. El primer día ha sido suave pero premonitorio. Presentación y toma de contacto con el idioma... los tonos, no voy a describirlo porque sería un coñazo, pero realmente creo que los españoles estamos muy poco dotados para éste idioma. Después de comer tuvimos una hora y media de clase de Tai - Chi :).
Resumiendo, primeros días satisfactorios. Choque cultural bastante grande que se lleva mejor al estar rodeado de gente española. Ciudad "rara", gente bastante amable y mucho mucho por ver todavía.
Seguiré comentando...